¿100 nuevas universidades públicas en Mexico?
Marzo 3, 2019

Con instalaciones prestadas, universidades nuevas arrancan en marzo

Cada escuela tendrá en promedio 320 alumnos

 Las 100 nuevas universidades que prometió el presidente Andrés Manuel López Obrador comenzarán actividades académicas más tardar en marzo, esto en instalaciones prestadas por las comunidades donde se ubicarán, informó Raquel Sosa Elizaga, encargada del Sistema de Universidades Públicas Benito Juárez.

“La primera semana de marzo ya estemos trabajando, aunque todavía las instalaciones de los planteles van a tomar un poco más de tiempo, no mucho. Vamos a empezar en locales alternos para que en marzo comencemos los cursos de recuperación de conocimientos de los muchachos que egresan del bachillerato”, dijo la funcionaria tras participar en el foro Implicaciones de la obligatoriedad y gratuidad de la educación superior en México, organizado por la ANUIES.

En una primera generación, cada escuela tendrá en promedio 320 alumnos y una plantilla de una docena de profesores. Todos ellos ya están siendo seleccionados, estudiantes y maestros, para que comiencen sus actividades a ás tardar el mes que entra.

Sosa Elizaga explicó que ya cuentan con los predios donde estarán las que llamó Escuelas Universitarias, y en estos momentos están en el proceso de registro ya que la mayoría fueron terrenos donados o puestos a disposición de la SEP por medio de comodato.

Sobre los planes de estudio, comentó que prácticamente están listos, y en los próximos días acudirán a la Secretaría para registrarlos para tener todos los documentos en regla.

“Son 38 carreras, una cantidad muy significativa son carreras para la producción de alimentación; una serie de carreras de desarrollo sustentable, todo lo que es el cuidado de medio ambiente; una serie de carreras sobre patrimonio histórico, social y biocultural de México”, añadió.

Cada universidad tendrá sólo de una carrera, la que esté más acorde a las necesidades de la comunidad en la que está ubicada. Los planes de estudios están divididos en ciclos de 14 semanas cada uno, y para egresar se tendrán que cursar en promedio ocho ciclos.

ADD_CONTENT_HERE

———————————————————————————————————-

Salvar a las universidades públicas o abrir 100 más

EDUARDO BACKHOFF ESCUDERO@EduardoBackhofflun 10 dic 2018 16:53

Con o sin apoyo financiero, el sistema de universidades públicas debe hacer una reflexión profunda

Con o sin apoyo financiero, el sistema de universidades públicas debe hacer una reflexión profunda

Foto propiedad de: Internet

Recientemente, se han publicado en los medios de comunicación varias notas sobre los problemas financieros que enfrentan las universidades públicas y que ponen en duda la viabilidad de abrir 100 universidades más en el país, como lo ha propuesto AMLO. Se dice que hay diez universidades públicas en el país en riesgo de quiebra, que se ubican en los estados de Chiapas, Estado de México, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Sinaloa, Tabasco, Veracruz y Zacatecas. Es decir, casi una tercera parte de las universidades estatales tienen tan serios problemas económicos, que están a punto de suspender el pago de la nómina a sus profesores, directivos y personal administrativo.

Ante esta circunstancia, los rectores de universidades se reunieron con la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, funcionarios de la SEP y el propio AMLO para solicitar una ayuda financiera de emergencia y poder subsanar el déficit financiero de estas instituciones, cuyos sistemas de pensiones son prácticamente insostenibles; solicitud que asciende a 94 mil millones de pesos para 2019. En esta reunión el Ejecutivo pidió a los rectores un compromiso de gasto austero; por su parte, el Secretario General da la ANUIES (Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior) se comprometió a hacer un uso más racional y transparente de los recursos públicos que reciben las universidades.

Es importante conocer las causas de esta crisis financiera, de las que destaco las cuatro siguientes: 1) mala administración de las autoridades universitarias, así como  discrecionalidad y opacidad en el uso de recursos, 2) establecimiento de compromisos sindicales para aumentos salariales, jubilaciones dinámicas y otras prestaciones, sin tener la seguridad de que éstas se podrán mantener en un futuro, 3) desvío de recursos universitarios para propósitos políticos y personales, como apoyo a campañas de futuros gobernadores y la creación de puestos para familiares y amigos, y 4) ausencia de una verdadera auditoría objetiva y externa a las universidades, que les señale las faltas y errores financieros para corregir y no aumentar el déficit presupuestario.

En este contexto de crisis universitaria, aparece la propuesta de AMLO de abrir 100 nuevas universidades a lo largo y ancho del país. Su objetivo es ampliar la oferta educativa y poder cumplir los futuros cambios a la Constitución, que convertirá como obligatoria y gratuita a la educación superior. Por ello, estas dos condiciones competirán por los escasos recursos que tendrá la educación en 2019. Tomado esto en cuenta, habría que preguntarse si no sería más racional resolver primero los problemas de las instituciones existentes, solicitándoles que aumenten su cobertura significativamente, para después crear las nuevas universidades que falten para poder cubrir la oferta de este nivel educativo. De procede al revés, se corre el riesgo de que no se cubran las necesidades financieras de las instituciones actuales, que se agraven sus problemas y que tengan que cerrar o, en el mejor de los casos, disminuir sus actividades académicas.

Con o sin apoyo financiero, el sistema de universidades públicas debe hacer una reflexión profunda, no solo de las causas que las han llevado al borde la quiebra, sino también de su comportamiento interno y externo.  Al respecto, me pregunto: 1) hay alguna razón por la cual algunas universidades estatales ofrecen sus servicios en otros estados, 2) por qué los órganos de gobierno se enquistan en las universidades y las convierten en la práctica en instituciones privadas, que las dirigen unos cuantos, 3) por qué los órganos de control financiero de las universidades (Patronatos) no actúan con independencia y, en vez, de proteger a los universitarios, protegen al rector y a su junta de gobierno en turno y 4) por qué no hay una verdadera participación democrática en los consejos universitarios, donde la inmensa mayoría de las decisiones se toman de manera unánime (o abrumadoramente mayoritaria), lo que denota un control férreo de la rectoría sobre la opinión de los docentes, estudiantes y trabajadores universitarios.

En fin, éstos y otros asuntos deben de revisarse a fondo, no solo para resolver de manera permanente el problema financiero de las universidades y el aumento de la oferta educativa, sino también deben de abordarse su funcionamiento y resultados que, en muchos casos, dejan mucho que desear. El gobierno de AMLO tiene la fuerza suficiente para incorporar cambios que mejoren la educación superior del país sustancialmente.

 

El autor es Presidente del Consejo Directivo de Métrica Educativa, A.C. y Ex presidente de la Junta de Gobierno del INEE

0 Comments

Submit a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *

PUBLICACIONES

Libros

Capítulos de libros

Artículos académicos

Columnas de opinión

Comentarios críticos

Entrevistas

Presentaciones y cursos

Actividades

Documentos de interés

Google académico

DESTACADOS DE PORTADA

Artículos relacionados

Share This