¿Cuánto afecta a Bachelet la animadversión de los estudiantes?
El Dínamo, 12 de abril de 2013 – 14:07 | Por: Nicolás Sepúlveda | 2
Gabriel Salazar, Carlos Huneeus, Eugenio Guzmán y Jaime Retamal analizan el divorcio del movimiento estudiantil con la ex mandataria, que a su llegada a Chile anuncio medidas para terminar con el lucro y una reforma tributaria.
Terminaba la conferencia de prensa donde los representantes del movimiento educacional entregaron su balance de la marcha de ayer y un grito comenzó a ser entonado por los estudiantes de las universidades privadas. “Volveremos, volveremos…”. Se unieron los voceros Confech y los secundarios. “Volveremos a tener…”. Cantaban también Jaime Gajardo y Barbara Figueroa. “Esa educación gratuita, que nos quito Pinochet… y Bachelet”. El mensaje era claro: este año no habrá concesiones para los candidatos presidenciales.
“Lo que nosotros estamos planteando es una transformación desde la raíz, concreta, de este sistema. Y a diferencia de quienes pretenden autodesignarse como voceros del incipiente movimiento social, nosotros si tenemos propuestas concretas”, lanzó la vocera de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios, Aces, Eloísa González.
Más duro fue el presidente de la Fech, Andrés Fielbaum: “Bachelet busca congraciarse con los estudiantes porque sabe que es el sector social más lejano a ella por lo que ocurrió el 2006, pero su prioridad es garantizar la estabilidad de los empresarios, por eso ha rectificado sus dichos y ahora dice que la gratuidad será sólo para algunos. El punto es que no se puede estar bien con Dios y con el diablo, con los estudiantes y con los empresarios de la educación. Y Bachelet, ante tal dicotomía, se pone del mismo lado que siempre… de los empresarios”.
La vocera del Movimiento de Estudiantes de Educación Superior Privada, Mesup, Valeska Concha, coincidió con sus compañeros y afirmó “es sintomático que sean los candidatos los que se están colgando de este movimiento estudiantil, no pueden hacer sus candidaturas sin tener que referirse a nuestros temas. Bachelet propone y después esconde la mano… no tenemos nada más que decir”, remata categórica.
En las asambleas estudiantiles ya se definió no apoyar a ningún candidato presidencial. “Desde la Confech vamos a levantar una agenda propia, que no se base en la agenda de las elecciones, y vamos a estar movilizados todo el año, apuntando a los cambios que queremos, que son los cambios radicales. Nuestra incidencia en las elecciones va a ser porque vamos a estar en la calle diciendo lo que queremos”, apunta el vice presidente de la Fech, Fabián Araneda.
La animadversión de los protagonistas del movimiento estudiantil hacia los candidatos presidenciales, se vuelve particularmente delicada para Bachelet, pues a su regreso al país en calidad de abanderada presidencial puso de inmediato énfasis en el tema de la educación, anunciando primero una iniciativa para terminar con el lucro y luego una reforma tributaria profunda para financiarla.
Pero ¿cuánto afecta la dura posición de los estudiantes a una figura como Bachelet, que en la última encuesta CEP mostró un 54% de intención de voto y que en sus tres años de ausencia del país ha mantenido un liderazgo indiscustido en el escenario político? Las opiniones son disímiles, mientras analistas como Carlos Huneeus, sostienen que la ex mandataria es incombustibles a los ataques; otros como el historiador Gabriel Salazar, creen que su credibilidad está puesta a prueba cuando hace anuncios que debe llevar a cabo una clase política altamente cuestionada.
HUNEEUS: “SU POPULARIDAD NO DEPENDE DE LOS TEMAS QUE VAN IMPULSANDO LOS MOVIMIENTOS SOCIALES… “
El director del Centro de Estudios de la Realidad Contemporánea, Cerc, Carlos Huneeus, plantea que “Michelle Bachelet tiene una popularidad muy amplia y eso no depende de los temas que van impulsando los movimientos sociales y que ella ha acogido. Ella se ha sumado a este movimiento y desde este punto de vista hay una cercanía ..”
Bajo la premisa anterior, Hunneeus asegura que la candidata del PS y el PPD se vuelve impermeable frente a las críticas. “Que la critiquen los dirigentes, yo creo que no le va a provocar perjuicio”, dice. Según el analista Bachelet correría con ventaja “ya que es alguien distinto al actual presidente Sebastián Piñera”.
EUGENIO GUZMÁN: “EL MOVIMIENTO PODRÍA IZQUIERDIZAR MÁS A BACHELET”
Otros analistas discrepan y consideran que el movimiento estudiantil sí puede dañar a la precandidata PS-PPD. El decano de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo, Eugenio Guzmán, asegura que un viejo fantasma podría volver a penar a Bachelet: la falta de liderazgo. “Probablemente va a surgir el cuestionamiento de cuánto liderazgo es capaz ella de exhibir y de si es capaz o no de dominar el movimiento estudiantil. Esa Bachelet con harto liderazgo que irrumpe en el escenario hace unas semanas atrás, no es comparable a lo que estamos viendo hoy”.
Además, Guzmán se muestra preocupado porque -a su juicio- el movimiento va a “desordenar la política”, lo que podría “izquierdizar aún más a Bachelet”.
JAIME RETAMAL: “LOS ESTUDIANTES PODRÍAN MARCAR UNA FUERTE ABSTENCIÓN EN LAS PRESIDENCIALES”
Jaime Retamal, investigador en educación de la Universidad de Santiago, pone el acento en los estudiantes y dice que “este año el movimiento estudiantil está mucho más maduro y ha adquirido aprendizajes respecto del 2011, con un escepticismo maduro y una mirada crítica más desarrollada”. Así, el analista sostiene que “si los estudiantes se lo propusieran, podrían incidir en las próximas elecciones, podrían marcar una fuerte abstención, como señal a toda la clase política”.
Según Retamal el rechazo a Bachelet es entendible, porque ella “por un lado manosea los conceptos y las categorías levantadas por la movilización estudiantil y, por otro lado, le da un portazo a los fines que la movilización estudiantil tiene”, argumenta en referencia a las precisiones que la pre candidata ha hecho respecto de sus planteamientos iniciales.
GABRIEL SALAZAR:
Para el premio nacional de historia, Gabriel Salazar, el tema va más allá de la propia Bachelet. Según su análisis, es la clase política completa la que está cuestionada y en estado de decadencia. Entonces cualquier maniobra de la ex mandataria chocaría con el fracaso al estar rodeada por los mismos políticos de siempre.
“Hasta el momento se supone que ella tiene simpatías por los planteamientos del movimiento popular. Pero una cosa es tener simpatía, y otra es jugarse por llevar a cabo lo que están planteando esos movimientos”, dice el historiador.
En su análisis Salazar sostiene que Bachelet pierde credibilidad frente al movimiento al prometer una reforma en educación pero con la misma clase política que hoy la ciudadanía está criticando.
“Michelle plantea que está de acuerdo con la educación gratuita, con algunas salvedades, y que va llevar adelante eso a través de un proyecto de ley que va a presentar al Congreso Nacional… con la misma clase política a la cual están criticando, y de la cual están desconfiando los movimientos sociales. No se va a avanzar mucho por ese lado. Por eso ella pierde credibilidad por parte del movimiento. El problema es de ella, no del movimiento…”, analiza el historiador.
”Hay una desconfianza estructurada, que se ha metido profundamente en la ciudadanía y en los movimientos sociales, hacia la clase política, que es la que está desprestigiada. Y por eso es que los políticos no hayan cómo recuperar esa confianza, y prometen cualquier cosa…”, remata.
————————————————————————-
Bachelet toma distancia de sus primeros dichos y habla de “avanzar hacia la gratuidad universal”
A solo dos días de la exitosa macha estudiantil que puso presión a los candidatos por sus demandas, la ex mandataria reiteró, en el acto de proclamación oficial del PS y PPD, la necesidad de eliminar la desigualdad, poner fin al lucro y terminar con los abusos. La ceremonia estuvo marcada por los guiños hacia el movimiento social.
Bachelet también se refirió a la conformación de una nueva Constitución, a una reforma al sistema binominal, una reforma tributaria y a la creación de una nueva mayoría “política y social”.
“Estoy aquí con toda la energía pero también con toda la humildad que se necesita para asumir esta enorme responsabilidad. Gracias por su cariño y por la confianza que ustedes depositan en mí”, dijo la ex mandataria.
Respecto al tema de la desigualdad, la aspirante a La Moneda dijo que “buscaremos un país más inclusivo, aquí no sobra nadie, esta es la misión de nuestra tarea, la mayoría de los chilenos nos demanda poner en el centro de nuestra prioridades la igualdad”.
La ex jefa de Estado también señaló que desde la recuperación de la democracia, el país ha tenido crecimiento y progreso, “pero seamos justos, hubo reformas que quedaron sin hacer. Un país necesita de cambios profundos y es por eso que he dicho que debemos construir una nueva mayoría política y social”.
Por tal motivo, “el pilar de nuestra propuesta es el combate contra la desigualdad, esa desigualdad que viven las personas a diario, es la letra chica, la imposibilidad de los trabajadores de negociar colectivamente, la discriminación que tiene tantos rostros. Esto no es un proyecto personal, es una tarea colectiva”.
Mientras se refería a terminar con el lucro y mejorar la calidad de la educación, la ex mandataria señaló por primera vez y tomando distancia de sus dichos que señalaban gratuidad solo para los quintiles más pobres, que se debe avanzar “decididamente hacia la gratuidad universal”.
En tal sentido, añadió que “nuestra propuesta es ambiciosa, esas transformaciones no puede esperar. Hay que iniciar una reforma profunda en educación que asegure educación pública y calidad, que garantice el fin al lucro y que avance en gratuidad universal”.
Respecto a la forma de financiar esta propuesta, Bachelet señaló que es necesario realizar una reforma tributaria que “nos permita contar con más recursos y que haga que los que tienen mas contribuyan más”.
Sobre la desconfianza que se ha generado en el país respecto a la política, la ex mandataria sostuvo que “necesitamos que Chile recupere la confianza en las instituciones. Debemos hacer de la política un lugar amplio, que más mujeres y jóvenes sean parte de este quehacer. Debemos lograr de una vez por todas que los chilenos en el exterior puedan votar”.
“Debemos comprometernos para que esta elección en Chile sea la última elección bajo el sistema binominal. Es esencial terminar con un sistema que es un freno para reformas esenciales. Pero esto no se reduce sólo al cambio electoral”, arguyó.
En la oportunidad, Bachelet también reiteró la necesidad de llevar a cabo una nueva Constitución, ya que a su juicio “Chile merece una carta fundamental nacida en democracia, una Constitución coherente con las condiciones actuales de Chile, necesitamos que garantice a chilenos y chilenas derechos económicos y sociales”.
Y para llevar adelante estas reformas, la ex Presidenta dijo que “es imprescindible que seamos capaces de construir una contundente mayoría ciudadana y parlamentaria. Debemos hacer nuestro máximo esfuerzo si queremos hacer nuestro Parlamento mayoritario”.
“Trabajemos juntos de cara al 30 de junio para que las primarias de la oposición sean participativas, alegres, masivas y fraternas. Construyamos una red de voluntarios en todo Chile, demos a conocer nuestras ideas y sueños, cada uno de nosotros puede hacer una diferencia. Que nuestros compatriotas sepan en cada rincón de Chile que pueden ser parte de esto”, explicó.
El momento más álgido sucedió al final del acto, cuando una mujer comenzó a gritar haciendo referencia a los derechos de los niños. Personas que estaban en el evento la sacaron por una puerta lateral impidiendo que la prensa pudiera acercarse a ella.
El discurso inicial de la jornada estuvo a cargo del timonel del PS, diputado Osvaldo Andrade, quien afirmó que “estamos ad portas del fin del paréntesis regresivo”, refiriéndose al Gobierno de Sebastián Piñera, y destacando que tienen “la obligación de no generar frustraciones”. “Hay que enfrentar el trabajo político con más humildad y menos soberbia”, sostuvo Andrade en una alocución que generó impaciencia entre los asistentes. De hecho, el ex ministro del Trabajo fue increpado por una mujer mientras pronunciaba su discurso.
Andrade mencionó al ex Presidente del Senado, Camilo Escalona, quien fue ovacionado por la concurrencia al Teatro Caupolicán.
Posteriormente, tomó la palabra el timonel del PPD, senador Jaime Quintana, quien dio las gracias a Bachelet por su retorno. El legislador valoró la alianza de su partido con el PS para esta campaña, resaltando que “el país necesita un proyecto de izquierda progresista coherente y sin complejos”. El timonel del PPD apeló a conquistar unidad en el sector “desde las esperanzas y no de las rencillas”, reconociendo que no ganarán la elección “con las mismas caras de siempre”. La presencia del PPD fue más masiva que la del partido de la precandidata y el discurso de su timonel fue notoriamente más aplaudido que el de Andrade.
0 Comments